Hoy me toca hablarles de uno de los grandes pilares de la literatura fantástica, Robin Hobb (seudónimo utilizado por Margaret Astrid Lindholm, como tal vez sepan, muchas escritoras utilizan seudónimos que suenen más o menos masculinos para no ser menospreciadas, sí, suena ridículo, pero así es, lamentablemente) con su "Trilogía del Vatídico" nos lleva por una trama llena de complot, crimen y secretos reales.
Nuestro protagonista en esta ocasión es Traspié (FitzChilvary en inglés, la verdad es que no entiendo la traducción al español) quien es el hijo bastardo del heredero al trono de los seis ducados, el príncipe Hidalgo quien por razones desconocidas ha renunciado a la herencia del mismo. En un mundo donde los bastardos son muy despreciados, Traspié terminará siendo conducido a la corte real donde crecerá en medio del desdén de los demás y una extraña habilidad mágica que le ayuda a congeniar con los animales, una habilidad rodeada de mucha superstición y que debe mantener oculta si quiere salvar la vida. Pero el rey Artimañas, su abuelo, verá algo en él y lo hará entrenar para ser un asesino.
Robin Hobb es en verdad una maga de la escritura, nos hará ver la trama a través de los ojos de Traspié y nosotros lo vamos a querer, es leal, inteligente y valiente, pero también comete muchos errores y tarda en ocasiones en comprender las sutilezas de la corte. Te parecerá que todo el mundo lo menosprecia o subestima, menos tú, sus amigos serán pocos frente a los eventos que tendrá que enfrentar y aún peor que eso, muchos ven en él una amenaza para el reino. Te invito a una fabulosa aventura donde sentirás una empatía irremediable hacia el protagonista.
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